domingo, 14 de octubre de 2012

DÍA 82: Mares inhóspitos y caos preceden al albor en su antesala

Amanecí vacía. Insulsa, hueca e insípida.

Tenia la abrumante sensación de haber sido despojada de todo lo que, con tanto esfuerzo, había construido y conservado durante años de experiencia. No me refiero a lo material, eso va y viene aunque uno desee retenerlo con el mayor de los anhelos... aludo a lo interior, a lo cimentado y erigido con años de práctica y maestría, con risas volátiles y llantos desgarrados, con tenacidad y constancia.

Sin embargo... amanecí despojada y baldía.

Inmediatamente analicé la situación, arropada por el pánico y la incertidumbre que suelen anteceder a un descubrimiento indeseado. Intrépida... me volqué hacia dentro y la negrura me invadió profundamente... perseverante... no cedí en mi búsqueda de respuestas reveladoras llenas de dolorosa verdad.

Lo que vislumbré fue muchas cosas menos afable y acogedor. Fui devorada por un torrente de vorágine hambrienta... delatando que donde pensé que había vacío y nulidad, existía caos y desesperación...

http://sololanada.blogspot.com/2012/03/caos.html

... experiencias inconclusas, caminos sin salida, deseos insatisfechos, frustraciones victoriosas, ruido, asfalto, asfixias emocionales... pensamientos anulados, libertades abortadas, dependencias esclavizadas y decadentes horas robadas a la negrura.

Navegué entre oscuros pensamientos y corazones descontrolados, inquisitivo e insaciable entendimiento, temores, turbaciones y desasosiegos... hirientes autodescubrimientos.

Naufragué.

Entre marejadas de lóbregas olas insaciables me dejé a merced del destino... de las corrientes imparables... y medité, mirando al oscuro infinito, que cuando me embarqué a surcar aquellos mares, sin barca ni carabela, lo hacía tan solo con aprensión y desvelo llenando mi maleta... ignorante navegante en mares de ida sin vuelta.

Quizás fue el empeño, quizás la supervivencia... pero fuera lo que fuera, exhausta logré alcanzar la solitaria pero sosegada orilla de la conciencia.

Recuperé el aliento y la sapiencia... sedimentando mis turbulentos pensamientos y acariciando mi alma agitada... robando aire a la espesura, obsequiando de reposo a mi magullada alma.

Tiempos de aturdimiento desorientado... imperiosos momentos de análisis desorbitados... hundimientos dolorosamente necesarios para...

... descubrir tras la batalla que la mochila es la que ahora queda desocupada... pesados arrastres de la vida anclados en simas de cavernas sepultadas.

Reconocer que para que amanezca un nuevo día, muchas veces es necesario preceder a la alborada con negruras y anarquías... despojarse de pesadas trabas acumuladas... luchar, con toda el alma, para llegar a orillas maitinadas y concederse, como meritoria medalla, una vida reciclada... un nuevo renacimiento con alforjas liberadas de amarres inservibles y cargas por la historia arrastradas.

Amanezcamos, que no es poco, en estos tiempos de incertidumbre consumada.

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4 comentarios:

M.G dijo...

Real como la vida misma. Hay que tocar FONDO para poder resurgir renovado a la vida. El Renacer.¿O no renace la vida cada día?. Amanace positivo, con luz, animoso...y poco a poco se va agotando y llega a ser gris y depués negro. Se terminó. Tocó fondo. Pero después vuelve a renacer y se repite el ciclo.¿ Y por qué nosotros, nuestra existencia, va a ser distinta?.
ANIMO que el resurgir es estar vivo!!!!!
Un abrazo.

Docecuarentaycinco dijo...

Hola M.G., tocar fondo no es mas que una situación necesaria que antecede, por lo general, a remontar el vuelo.

Este escrito no está insporado en mi vida actual, quise traer a mi memoria algunos meses de mi vida pasada, en concreto los meses últimos que pasé en la ciudad anterior a la que vivo ahora (hace ya unos 2 años) y que hicieron tomar conciencia de que mi vida no estaba siendo invertida por el camino que deseaba (además de una serie de circustancias laborales que lo hicieron que pasara realmente mal). Me inspiré en aquellos días, en aquellos recuerdos, para entender que, tal y como empezabamo, se necesita muchas veces tocar fondo momentaneamente para poder resurgir con mayor claridad y fuerza.

Un beso enorme y ¡FELIZ DIA!

Menchu dijo...

Si ese período es el que yo intuyo ... no me extraña. Ahora que te conozco un poco, me pregunto qué hacías ahí ... Menos mal que invertiste poco tiempo!

Si no hablamos de lo mismo, mis sinceras disculpas por el malentendido.

Docecuarentaycinco dijo...

Hola Menchu, bueno de estos periodos puede haber más de uno... pero sí, creo que en este caso la inspiración para escribir este día viene de donde piensas.

Hablamos de lo mismo ;).

Un beso enorme.