sábado, 22 de septiembre de 2012

DÍA 60: Llegar juntos es el principio, mantenernos juntos es el progreso y trabajar juntos es el éxito

Me dieron la noticia por teléfono, en un entorno poco apropiado para exteriorizar mi asombro y exaltación por la primicia. Tuve que contenerme y mantener la compostura hasta que salí de mi puesto de trabajo en aquella angustiosa oficina.

Fue al llegar casa y descargar sobre el sofá el abrigo, el bolso y la esclavitud laboral... cuando tomé conciencia del alcance de aquella llamada recibida hacía pocas horas... en la que me dijeron que me habían seleccionado para aquel vertiginoso puesto de trabajo.

En ese momento, ya liberada del caos ocasionado por el vibrante ruido y las cegadoras luces latentes al otro lado de los muros de mi casa... no lo dudé... y mi segundo pensamiento fue llamarla rápidamente para que me ayudara a tomar la decisión (el primer pensamiento, indudablemente, fue la imperiosa necesidad de sentirme una de las personas más afortunadas de este mundo).

Todavía conmocionada por el mensaje recibido decidí marcar su número de teléfono y pedirle consejo.

Cuando respondió a mi llamada comencé a darle una breve introducción para ayudarle a ponerse en situación y, sintetizando, le expliqué... que me habían seleccionado tras un intenso proceso de entrevistas... que me proponían un nuevo reto personal y laboral... que suponía dejar atrás una vida oscura pero cómoda y controlada y adentrarme en una incierta y desordenada... que la aceptación suponía un giro absoluto y extremista a la realidad que ahora conocía...que...

...en fin, cuando me dí cuenta mi escueto resumen telefónico se había convertido en un extenso monólogo con idas y vueltas, con indecisiones, preguntas, dudas y vacilaciones... a los veintidos minutos de soliloquio ella me espetó secamente...

"¿Tomarás sola la decisión?"

Evidentemente NO... Estaba apoyándome en su opinión para tomarla... También os puedo confesar que los dos siguientes días estuvieron repletos de largas horas rebosantes de conversaciones con amigos, familiares, vecinos, transeuntes y con cualquier persona, despierta o dormida, que me cruzaba en mi camino...

"¿Vivirás sola la aventura?"

Evidentemente NO... Mucha gente formaría parte de la hazaña... el ser humano es un ser social por naturaleza, y en esta aventura muchos serían con los que iba a compartir el camino...

"¿Soportarás sola el peso de la responsabilidad en el nuevo puesto?"

Evidentemente NO... Seríamos un equipo de trabajo con un objetivo compartido para alcanzar acompañados.

De este modo, a cada negativa que yo le ofrecía... una nueva pregunta me proyectaba.

Cuando entendí finalmente lo que pretendía hacerme ver, me despedí cariñosamente y colgué con suavidad el auricular. Me quedé durante cinco minutos estática... mirando el silencioso aparato reposando sobre la cómoda junto al listín telefónico...

...podría contaros entonces todo lo que pasó desde ese momento, pero creo que ya se nos ha hecho tarde... si os parece mañana seguimos juntos el camino, al fin y al cabo el viaje es largo y yo prometo no dejaros, compañeros, alcanzar solos la cima...

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4 comentarios:

Menchu dijo...

Ja, ja, ja!! Esta entrada ... ficción, ficción ...
Estupendas preguntas y mucho mejores aún las respuestas.
Procuraré recordarlas si surge la ocasión!!
El video excelente también. Lo proyectaba yo en unos cuantos foros a ver si recogen el testigo!

Docecuarentaycinco dijo...

jajaja, sí, ficción, ficción... poco es (que casi todos mis cuentos aunque no siempre lo parezcan...). jajajaja.
Tu estabas el 10 de Enero de 2011 en la oficina? Igual estuviste más cerca de este cuento de lo que crees ;).
Y sí, este cuento y este video deberían verlo mucha gente ;).
Un besazo enorme y, nuevamente, ¡feliz dia!

M.G dijo...

¡ DIOS!"!!! CÓMO ME RECUERDA!!!!!
eEn la vida hay y existen esas circunstancias y hay quien las sufre por el nuevo reto y quien las sufre por el reto que se va a tomar.
Un poema que hice para quienes les quiero en el alma dada esta circunstancia:
" Si les hubiera cortado las Alas,
hubieran sido mias y no hubieran escapado.
Sí, pero hubieran dejado de ser
AVES LIBRES.
Pero...yo...en el fondo yo...
Yo,lo que realmente amaba,
Lo que mi amor sentia por ellas,
lo que más anhelaba era a mis aves
PERO A MIS AVES LIBRES.
Por eso las dejé ir...
Y se fueron."
Muchos Besos y Buen día.

Docecuarentaycinco dijo...

Estoy absolutamente segura de que ellas a quellos a los que va destinado el poema agradecen esa libertad y tambien te echan de menos y seguro que juntos haceis un bien equipo.
Un abrazo ENORME M.G.