Padecía de insomnio crónico y en sus horas de desvelo le gustaba escribir pequeños poemas de amor a una imaginaria enamorada.
Cada día, diez poemas... se desafiaba.
Estaba convencido que el día que fuera capaz de escribir un poemario completo, sería el día en que ella aparecía para mecerse entre sus infinitos versos, enamorada y eterna.
Pero ella no llegaba y él seguía encarcelado y rendido al amor imaginario... escribiendo pequeños poemas apasionados al viento.
Cada día, mil suspiros de añoranza... que regalaba al vacío.
Murió un amanecer del mes de Mayo, entre infinitos versos confundido.
Y fue entonces que llegó ella, en calma, llena de amor no consumido.
Lo arropó entre sus brazos, en medio de un vasto poemario escrito en noches de vigilia y amor desmedido.
Con su gastada pluma entrelazada entre los dedos, goteando tinta y sentimientos... así fue como ella lo conoció... así fue como ella lo meció, por fin, fundiendo su alma con un deshabitado cuerpo.
Y al mirar la última hoja del poemario escrito en noches de insomnio y duelo... pudo ver tres gotas de tinta húmeda, precedidas del ansiado desenlace... "Amor, para siempre, Te Quiero".
 |
| http://blog.lahojadearena.com/2012/02/cartas-de-amor/ |
.................
No hay comentarios:
Publicar un comentario